Almonaster la Real y sus aldeas preparan las Cruces de Mayo
Descargar PdfEstas fiestas están declaradas de Interés Etnológico e incluidas en el Catálogo General de Bienes Patrimoniales de Andalucía

Cuando se aproxima el mes de mayo Almonaster la Real y sus aldeas se preparan para vivir las Fiestas en Honor a la Santa Cruz, una de las tradiciones más arraigadas entre la población. Esta celebración es una de las manifestaciones culturales más importantes de la Sierra, puesto que es una demostración única de la riqueza cultural, histórica y folklórica de esta zona. Cada año, los vecinos repiten los ritos ancestrales heredados de padres a hijos para el deleite de todos los asistentes.
Las Cruces se viven con devoción y fervor en Almonaster la Real y en las aldeas de Aguafría, Las Veredas y Calabazares, donde la tradición se ha recuperado hace algunos años. Aguafría es la primera en rendir culto a la Cruz, abriendo el paso a un mes de mayo inigualable en el que las estrechas calles de estas poblaciones se visten con el encanto especial de los mantones y trajes de serrana y los sones de las Coplas del Romero, las panderetas, la flauta y el tamboril.
El viernes 26 de abril, los aguafrieños comenzarán los actos en honor a la Cruz. La llegada del tamborilero en torno a las 16:00 horas supone el inicio de la fiesta y es la antesala de la Jira campestre, que se inicia a las 18:00 horas. Los vecinos de Aguafría cortarán los pinos y el mayo que adornarán la Cruz y disfrutarán de una merienda ofrecida por la comisión de fiestas. Tras la jira, colocarán los pinos y el chopo alrededor de la Cruz entonando los primeros fandangos y coplas. Estíbaliz Romero, miembro de la comisión, explica que los preparativos se desarrollan durante las semanas previas “con la elaboración de las flores y la recogida de la chubarba”, que se realizará este mismo viernes para que se encuentre en buenas condiciones al inicio de las fiestas. Este primer día concluirá con una cena ofrecida por la mayordoma sobre las 22 horas y una actuación flamenca sobre las 00:00 horas seguida de un DJ:
El sábado 29 a las 7:00 horas, de nuevo el tamborilero dará inicio a la jornada recorriendo las calles de la aldea. A continuación, las mujeres se encargarán de adornar la Cruz y cantar, al finalizar, las coplas y fandangos del día. A las 12:00 horas, se celebrará la función religiosa y la procesión de la Santa Cruz por las calles de la localidad.
En torno a las 19:00 horas, comenzará la Traída del Romero acompañado del tamborilero y las serranas, sin duda, uno el momento más esperado y significativo de esta festividad. Los mayordomos son los grandes protagonistas en este rito, un cargo que este año ostentarán Esteban Cañizares e Irene Cáceres. Todo el cortejo realizará un recorrido cargado de historia y tradición que finalizará alrededor de la Cruz, a lo largo del cual se escucharán los fandangos típicos de esta aldea. Para Estíbaliz Romero, “este es el momento más significativo y emotivo de las Cruces, aunque si te gustan de verdad todos los actos son igual de bonitos e importantes”. Al finalizar el Romero, dará comienzo el baile amenizado para la ocasión por el cuarteto ‘Sinaí’.
El domingo, el día estará dedicado a la convivencia de todos los vecinos. A partir del mediodía será el momento de disfrutar del ambiente festivo con la tradicional ensalada. A las 16:30 horas, juegos infantiles con carrera de cintas y demás juegos para los más pequeños de la aldea seguidos de café y buñuelos para los asistentes. Para finalizar, se llevará a cabo el nombramiento de la nueva comisión que se encargará de organizar la fiesta en el año 2019.
Cruces de Almonaster la real, entre coplas y piques
Las Fiestas de la Cruz de Almonaster la Real se iniciarán el próximo viernes 3 de mayo, momento en el que comenzarán los actos alrededor de las dos Cruces de esta localidad, la Cruz del Llano y la Cruz de la Fuente. La enorme riqueza de esta celebración ha propiciado que estén declaradas de Interés Etnológico e incluidas en el Catálogo General de Bienes Patrimoniales de Andalucía.
Uno de los elementos más representativos es el pique existente entre las hermandades de las dos Cruces, una circunstancia que, lejos de suponer un problema, ha contribuido a su enriquecimiento y arraigo a lo largo de los años. No en vano, esta competitividad ha hecho que la fiesta se engrandezca y se mantenga viva a través del tiempo.
Tanto en Almonaster la Real, como en las aldeas en las que se celebran las Cruces, el mes de abril es el denominado Mes de las Flores. Su nombre se debe a los preparativos llevados a cabo durante estas semanas previas a la celebración. Cada tarde, las mujeres del pueblo confeccionan las flores de papel con las que se adornarán las calles y las Cruces, limpian y preparan los jarrones, ponen a punto sus trajes de serranas y ensayan las Coplas del Romero y los fandangos.
El Domingo de Chubarba, justo el previo a las Cruces, las dos hermandades salen al campo a recoger la chubarba, el arbusto que se utiliza tradicionalmente para decorar el arco y las esquinas de la Cruz. Como explica Mari Carmen Romero, presidenta de la Hermandad de la Cruz del Llano, “los preparativos del mes de abril son el momento final del trabajo que se realiza durante todo el año para que todos salga perfecto”.
Esta particular celebración de las Cruces está cargada de ritos que se repiten desde tiempo inmemorial, atrayendo la atención de miles de visitantes que cada año son embaucados por esta representación del folklore y la cultura popular de la zona. El alcalde de la localidad, Jacinto Vázquez, señala que “tanto Almonaster como las aldeas se transforman durante esta celebración, puesto que es una tradición muy arraigada que vivimos con gran intensidad. Nuestras Cruces son únicas y por eso son muchas las personas que vienen cada año a conocerlas”.
El próximo viernes 3 de mayo arrancará la celebración de las Fiestas de la Cruz en Almonaster con el inicio de los actos de las dos hermandades. La Hermandad de la Cruz de la Fuente celebra a partir de las 21:00 horas la Noche del Pescaíto, un momento para el disfrute y la convivencia que marca el inicio de todas las ceremonias que tendrán lugar durante los siguientes días. Por su parte, la Hermandad de la Cruz del Llano, lleva a cabo a partir de las 21:30 horas el Pregón, que supone el punto de partida a sus actos de adoración a la Cruz y que este año será realizado por María Isabel Martín.
El sábado de Cruces tiene lugar la Tarde de las Flores, un acto muy especial en el que cada hermandad presenta a la Mayordoma y las Diputadas de ese año. Los llaneros se reúnen a las 21:00 horas en torno a su Cruz, lugar en el que las serranas comienzan a entonar los primeros fandangos. A continuación, se desplazan hasta el Puente de la Tenería para recoger el chopo y regresar de nuevo a la Cruz sobre las 22:00 horas. En ese momento, junto a la Mayordoma y sus diputadas, se dan tres vueltas en torno al monumento y se acompaña a la Mayordoma hasta su casa. Por su parte, la Hermandad de la Cruz de la Fuente, se traslada durante la tarde a la aldea de El Arroyo para, a la vuelta, recoger el chopo y presentar a su Mayordoma en el pueblo en torno a las 22:30 horas. Al son de los fandangos de la Cruz, la Mayordoma y las serranas dan las tres vueltas a su Cruz y cortejan a la Mayordoma hasta su casa.
Una vez se ha completado este ritual, se inicia la conocida como Noche de los Pinos, en la que se interpretan los conocidos Fandangos de Piques. Al llegar la madrugada las dos Cruces se visitan entre salvas de cohetes para cantar a la contraria estos fandangos, que ponen de manifiesto la rivalidad que existe entre las dos devociones. Como señala Inmaculada Parente, presidenta de la Hermandad de la Cruz de la Fuente, “los piques son una parte más de las Cruces, pero aunque esta rivalidad o picaresca existe durante todo el año, ambas hermandades nos mostramos siempre el máximo respeto”. La misma Noche de los Pinos, cuando empieza a amanecer, se colocan los cuatro pinos en las esquinas de cada Cruz y se preparan todos los adornos que visten a los respetivos monumentos.
El Domingo de Cruces, es uno de los días más grande en Almonaster la Real, porque es cuando se celebra el Romero. Mari Carmen Romero señala que “este es un momento muy especial para todos, pero especialmente para los mayordomos, porque es un día muy esperado y de mucha emoción para ellos”.
La Cruz de la Fuente inicia el Romero sobre las 9:30 de la mañana, mientras que la Cruz del Llano lo hace a partir de las 18:00 horas. A la llamada de los cohetes las serranas se reúnen en torno a su Cruz para comenzar un ritual en el que los mayordomos toman especial protagonismo y las Coplas del Romero suenen ininterrumpidamente al compás de panderetas, flauta y tamboril. Se trata de canciones de carácter didáctico en las que se van explicando las distintas fases de este rito. Los mayordomos de este año de la Cruz de la Fuente son Natalia Garcia y Rafael Martín, y los de la Cruz del Llano son Iris Casado y Daniel Martín.
El Lunes de Cruces, es el turno de los más pequeños con la celebración del Romero Infantil, en el que los niños repiten el ritual del día anterior para fomentar el arraigo crucero y perpetuar la festividad. El de la Fuente dará comienzo a las 11:30 horas y el del Llano a las 19:00 horas. Por último, el martes se lleva a cabo la Jira, un día en el que las hermandades salen al campo para disfrutar de la convivencia y, a la vuelta, en el pueblo, se entregan las nuevas mayordomías. La entrada de la hermandad del Llano se produce en torno a las 22:00 horas, mientras que la de la Fuente se realiza a las 23:00 horas. “Aunque es difícil quedarse con un solo momento, la entrega de la mayordomía es uno de los más emotivos, por las lágrimas de los que dejan esa función. También, destaco la entrada a la Iglesia el día del Romero, porque las panderetas tienen un sonido diferente”, explica Inmaculada Parente.
Una vez finalicen las Cruces de Almonaster la Real, los días 10, 11 y 12 de mayo tendrá lugar la Cruz del Hoyo de Las Veredas y 25 y 26 de mayo será la Cruz de los Olivos de Calabazares. Cada una de las aldeas realiza su aportación particular al folklore de estas fiestas porque mantiene sus propios matices y rituales que contribuyen a engrandecer esta tradición de referencia entre todos los serranos.